lunes, 22 de septiembre de 2014

Rayuela cap. 93 (fragmento) - Julio Cortazar.

Pero el amor, esa palabra... Moralista Horacio, temeroso de pasiones sin una razón de aguas hondas, desconcertado y arisco en la ciudad donde el amor se llama con todos los nombres de todas las calles, de todas las casas, de todos los pisos, de todas las habitaciones, de todas las camas, de todos los sueños, de todos los olvidos o los recuerdos. Amor mío, no te quiero por vos ni por mí ni por los dos juntos, no te quiero porque la sangre me llame a quererte, te quiero porque no sos mía, porque estás del otro lado, ahí donde me invitás a saltar y no puedo dar el salto, porque en lo más profundo de la posesión no estás en mí, no te alcanzo, no paso de tu cuerpo, de tu risa, hay horas en que me atormenta que me ames (cómo te gusta usar el verbo amar, con qué cursilería lo vas dejando caer sobre los platos y las sábanas y los autobuses), me atormenta tu amor que no me sirve de puente porque un puente no se sostiene de un solo lado, jamás Wright ni Le Corbusier van a hacer esos ojos de pájaro, para vos la operación del amor es tan sencilla, te curarás antes que yo y eso que me querés como yo no te quiero. Claro que te curarás, porque vivís en la salud, después de mí será cualquier otro, eso se cambia como los corpiños.
[...]
Sacás una idea de ahí, un sentimiento del otro estante, los atás con ayuda de palabras, perras negras, y resulta que te quiero. Total parcial: te quiero. Total general: te amo. Así viven muchos amigos míos, sin hablar de un tío y dos primos, convencidos del amor-que-sienten-por-sus-esposas. De la palabra a los actos, che; en general sin verba no hay res. Lo que mucha gente llama amar consiste en elegir a una mujer y casarse con ella. La eligen, te lo juro, lo he visto. Como si se pudiese elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos y te deja estaqueado en la mitad del patio. Vos dirás que la eligen porque-la-aman, yo creo que es al vesre. A Beatriz no se la elige, a Julieta no se la elige. Vos no elegís la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto. Pero estoy solo en mi pieza, caigo en artilugios de escriba, las perras negras se vengan como pueden, me mordisquean desde abajo de la mesa.
[...]

sábado, 20 de septiembre de 2014

Justicia

No se cuanto tiempo deje que me consumiera todo de mi, la deje hacerlo sin ningún miramiento. Llegado el momento decidí que yo también debía consumirla, ella no me dejo... Necesitaba empezar a llenar ese vacío de todo lo que le di... Para mi no existía esa opción. Yo era totalmente suyo, ella no tenia nada para mi...

miércoles, 17 de septiembre de 2014

Los nadies / Eduardo Galeano - El libro de los abrazos.

Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni nunca, ni en lloviznita cae del cielo la buena suerte, por mucho que los nadies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o se levanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando de escoba.
Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada.
Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos:
Que no son, aunque sean.
Que no hablan idiomas, sino dialectos.
Que no profesan religiones, sino supersticiones.
Que no hacen arte, sino artesanía.
Que no practican cultura, sino folklore.
Que no son seres humanos, sino recursos humanos.
Que no tienen cara, sino brazos.
Que no tienen nombre, sino número.
Que no figuran en la historia universal, sino en la crónica roja de la prensa local.
Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata.

Mi odioso yo

Al ver todo perdido, por regla general, mi raciocinio empieza a fallar y hago demasiadas estupideces... Por que he de ser tan visceral y temeroso... Tantas virtudes que se pierden por la cobardía. De lo sublime a lo nefasto.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Recuento - actualización diaria...paso a paso.

La conocí... Inmediatamente supe que era diferente.

La primera platica, es muy interesante, es la representación de la aspiración frustrada de libertad que anhelaba...

Empecé a interesarme en su vida, no estaba equivocado, sobresalía sobre todo lo que conocía sobre "mi mundo".

Nos reunimos por primera vez solos, mi nerviosismo denotaba la tensión del momento, ella, desinhibida, es tan diferente de toda mi concepción...

Ese primer encuentro lo marco todo, solo quería satisfacer sus necesidades y verla feliz, desde ese momento solo he maquinado que hacer por ella...

Empezamos a hablar diario... En verdad a alguien le interesaba quien era... Teníamos intereses en común, no había criticas a mis gustos, le parecía interesante... Me sentí en un lugar seguro al cual podría acudir... Sin miedos ni barreras, podía ser yo...

La primera vez que iba a su casa... Casi nos besamos... Ese día me perdí totalmente en ella...

Siguieron las platicas, las salidas, los encuentros y desencuentros. Me estaba enamorando perdidamente, ella no pensaba lo mismo... Cada día a su lado era feliz e inmensamente triste...

Había veces que me quedaba en su sillón, me costaba mucho trabajo conciliar el sueño solo quería dormir a su lado, no se por que si era tan problemático me seguía quedando. Me despertaba muy temprano, a veces me sentaba en el suelo de su zotehuela fumando un cigarrillo, esperando que despertara, esperaba volver a ver sus ojos...

No se cuanta distancia recorría para poder llegar a su encuentro, jamas había hecho algo así por nadie, me costaba mucho ir lejos por alguien, por ella perdía el miedo a caminos desconocidos solo quería estar a su lado. Cenar con alguien después de un día de trabajo era algo desconocido, me gusto esa nueva vivencia. Abría mi mundo a tantas cosas tan simples y tan bonitas.

Las cosas se complicaron, mis deseos iban más lejos que los suyos, quería compartir mi vida con ella, ella solo quería parte de lo que le podía ofrecer,la diversión y tener con quien hablar... Se acercaba el momento de decir adiós, aun no había tantos daños colaterales que lamentar. Había tomado una decisión...

Lo daba todo por perdido y cometí un error fatal... Hay cosas que solo deben de pertenecer entre dos... Ese día perdí tanto...

Inicie mi búsqueda por el regalo perfecto para ella en diciembre... Era algo alocado y no había margen de error... Debía crear magia... Inició mi supuesto camino al adiós....

Tenía una carta, bastante larga escrita por días, miles de enmendaduras, abría totalmente el corazón y exponía todo lo que sentía, agradecía por todo lo vivido y termina en un amargo adiós... La seguía escribiendo aunque nos seguíamos viendo, ella ya había puesto su distancia de mi, ya no había llamadas diarias ni mucho menos mensajes, fue clara... Estaba saliendo con alguien, estaba destrozado, sin ser nada llore amargamente y engrosaba la carta... El plan ya estaba decidido, diciembre seria el final, vivíamos por el momento el ocaso de lo que eramos y habíamos vivido.

Las cosas se ponían cada vez mas difíciles, yo viviendo la frustración de no saber que mas hacer para que se enamorara de mi, empecé a estar enojado por la forma en que iban las cosas, estaba triste y se volvió tediosa mi presencia, ella se empezó a alejar en consecuencia, había veces que salíamos y hacia lo mejor posible para darle mi mejor cara, le recordaba los primeros días cuando empezamos a salir, no siempre era posible, es muy difícil estar conmigo en ese estado. La maquinaria seguía su marcha, seguía adquiriendo cosas para darle el mejor regalo de despedida, jamas me había esforzado tanto, era el último suspiro.

Antes del final desistí, no podía alejarme se ella, le leí la carta que con esmero prepare, no quería que me alejara de ella, ¿por que es tan difícil? Ya no se si sólo le gustaba que alguien se preocupara intensamente por sus cosas o si era sólo el cariño que me tenia, no podía alejarme de ella a pesar del intenso dolor que me provocaba, la fecha de la magia seguía latente el día estaba próximo a llegar... Debí de ser mas fuerte.

No puedo continuar escribiendo esto...