Y por que tenia que ser mi cumpleaños diferente, odio ese día, pero estúpidamente espere y espere que por algún milagroso motivo aparecieras para felicitarme, que estupidez.
Tu ya eres feliz y alejada de mi vida, pero como te extraño, hace unos días soñé contigo de verdad que eso me hizo muy feliz hasta que recobré totalemtne la conciencia, empecé a llorar... Quizá ese sueño alimento esa estúpida ilusión.
A quien quiero engañar mi dulce dolor, sin ti sólo soy un cumulo de piezas rotas que ya no tienen remedio, sobrevivo a base de sueños y recuerdos, se llegan a agotar lentamente... La soga sigue apretando.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario