Quiero, ignorado y sereno
por ignorado, y cabal
por sereno, colmar mis días
de no querer más de ellos.
A quienes la riqueza toca
el oro irrita la piel
a los que la fama alienta
se les empaña la vida.
Para quienes la felicidad
es sol, vendrá la noche.
Mas para quien nada espera
todo lo que viene es grato.
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